Por Karla de Fernandez.
“Ya nunca siento apego por mi pareja”. Si, con pena reconozco que esa periodo la use muchisimas veces, no unico cuando hablaba con mis hermanas, sino en mis oraciones ademas. Efectivamente estaba convencida de que bien nunca amaba mas al adulto que enfrente de Dios habia prometido amar hasta que la muerte nos separara.
?Sabes? he distinguido a hombres y hembras que me han expresado que ellos tampoco sienten amor por su pareja. El matrimonio seria un brillo de la union de Cristo y Su Iglesia, asi como el matrimonios deberian reflejar esa liga, perdon asi como reconciliacion.
Las mujeres podriamos ser tentadas a desear vivir en una cinta romantica. Sin embargo debemos conocer que el matrimonio posee un fin mas poderoso, con implicaciones eternas, una herramienta viva de estas buenas noticias de Dios a la humanidad.
?Por que dejamos de amar?
El pecado, el egoismo asi como el honor matan el apego. Nos centramos tanto en nosotros mismos (varones asi como hembras), en nuestra satisfaccion, en percibir atenciones asi como en ser el foco. Aunque si cada individuo de nosotros se dedicara a hacer oportuno al otro, entonces seriamos felices los dos. Si nutrieramos el corazon asi como las afectos de el otro, permaneceriamos enamorados por toda la vida. Sin embargo, estamos acostumbrados an admitir desplazandolo hacia el pelo nos olvidamos de dar.
El pecado lo arruina al completo, tristemente cuando pensamos en el pecado en nuestro casamiento, nunca pensamos en el nuestro. Nos enfocamos en al completo lo que nuestro conyugue permite o no realiza. Cuan lejos esta esto de el recomendacion de Dios. La asi como una diferente oportunidad la Biblia nos invita an atizar nuestro corazon, analizar nuestros razones desplazandolo hacia el pelo admitir la viga en nuestros ojos anteriormente de pretender conseguir la paja de el orificio al margen. Continue reading “Bien nunca siento amor por mi pareja. El pecado, el egoismo y no ha transpirado el orgullo matan el amor.”